Descripción
La manteca de karité, se extrae del fruto del árbol de karité. Este es un árbol que crece en la sabana africana, con una vida útil de hasta 3 siglos. Comienza a producir frutos después de los 15 años, alcanzando la madurez alrededor de los 25-30 años. Pero la productividad máxima es de los 50 a los 100 años, que es el principal inconveniente en su cultivo, y se necesitan varias generaciones para aprovechar su fruto. Son similares a los aguacates, pero más pequeños. Con el fin de obtener manteca de karité, la fruta se retira y las nueces se rompen y se trituran. La pasta obtenida se somete a un proceso de purificación y refinación por métodos tradicionales, después de las recetas desarrolladas por familias productoras durante varias generaciones. La manteca de karité así purificada tiene una consistencia cremosa y un color blanco marfil.
Historia
La manteca de karité se ha usado como una loción cosmética y terapéutica durante miles de años. Sus orígenes llegan al salón de belleza de Cleopatra en Egipto. Poco después, se descubrieron sus propiedades curativas. La manteca de karité fue popular incluso en la Edad Media, en África occidental y en las regiones costeras. Se vendió en cantidades impresionantes en el mercado europeo. Sus usos comenzaron a diversificarse, desde el jabón hasta la descongestión nasal. Sigue siendo un sustituto popular para la manteca de coco en el chocolate, aunque todavía funciona principalmente como un producto cosmético, como en la época de Cleopatra. Y nadie se ha quejado todavía, aunque han pasado miles de años. Por el contrario, en Burkina Faso, ¡la manteca de karité ha sido nombrada como el "Oro de las mujeres;! Sin embargo, si hubiera quejas, probablemente provendrían de los hombres, locos de celos.
Propiedades
La manteca de karité es uno de los productos cosméticos más usados, desde el cuidado de la piel hasta el cuero cabelludo y el cuidado del cabello. De hecho, la manteca de karité es la base de muchos productos para el cuidado debido a sus propiedades calmantes e hidratantes. Más allá de los muchos beneficios que brinda al cuerpo, también es conocida por prevenir arrugas y ayudar a las personas con piel reseca que se descama fácilmente. El alto contenido de ácidos grasos proporciona hidratación y elasticidad a la piel. Debido a sus propiedades antiinflamatorias, la manteca de karité ha demostrado ser un remedio benéfico para los pacientes que sufren reumatismo.